NOTA

ROBERTO BERTOLO: “TENGO UNA VIDA LINDA”

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Shows, grabaciones, entrevistas, streamings…El Grupo Almendrado está activo, con sus grandes éxitos, con novedades, con un estilo definido que se renueva en cada show porque se preocupan por no repetirse y por sonar cada día mejor.

Roberto Bertolo, el líder y cantante de la banda, es un referente de la movida tropical y, por su humildad, por su energía y estilo de vida, un gran referente para los más jóvenes.   

-Estás muy activo. Tuviste un 2024 a pleno.

-Sí,  fue un año de mucho trabajo, de viajes, también de hacer varios streamings, que están muy de moda. Antes era la radio, ahora son los streamings. A Pasión de Sábado también vamos cada tanto. Fue un año fantástico desde lo artístico.  Grabamos una versión de “Que levanten las manos”, que hicimos al estilo del Grupo Almendrado. También presentamos con Antonio Ríos la canción “Costumbres”, de Juan Gabriel.

-¿Qué se viene?  

-Venimos en un tiempo de grabación para ofrecer cosas nuevas al público. Grabamos con Ezequiel Pradas un ft con canciones de Almendrado; también un tema con Chelo, del Grupo Green. Y vamos a grabar dos más,  de los que no puedo adelantar nada por ahora (pero ustedes van a ser los primeros en enterarse). La verdad es que estamos con una nueva fuerza, un nuevo sueño, de la mano de Oveja Producciones, de Jorge Ovejero, y de Oveja Récords.

-En los bailes, cuando vas a los streaming, y en las redes elogian tu voz. Los más jóvenes quieren saber cómo te cuidas.

-Sí, me miman, jaja. Lo que digo es que está “más grande” la voz. Estoy seguro que es porque tengo una vida linda. Hace muchos años vengo trabajando para este futuro que me toca vivir. Soy un hombre de familia, enamorado de mi esposa y de mis hijos. Tengo paz. Quiero que se entienda cuando digo esto, porque podría interpretarse que no me importa nada. Y no es así. Todo me importa. Busco ser responsable en lo que me toca hacer. A la hora de cantar tengo un buen descanso, pienso un montón de veces las notas de las canciones, las medito, las trabajo en la semana. Me preparo. Por sobre toda las cosas, creo que la serenidad y la seguridad que Dios me da es el secreto, si es que lo hay. Soy un tipo feliz y eso se puede notar cuando canto, cuando hago lo que me gusta.

-Eso de que te miman es verdad. Te elogian también la vestimenta, que seguís con el pelo largo y tu manera de ser…

-Me dicen cosas, sí, me preguntan sobre la ropa y les contesto que me pongo lo que tengo, jajaja. El pelo me lo dejé crecer otra vez en la pandemia. Durante una larga etapa usé el pelo corto, pero fue el tiempo en el que me ausenté de la música; entonces, la gente no me vio con pelo cortito, casi pelado. Como te dije, lo dejé crecer cuando no podíamos salir ni a la esquina, hasta hoy, pero estoy pensando en cortarlo de nuevo porque mantenerlo lleva mucha dedicación.

-¿Cómo está conformada la banda, quiénes te ayudan en lo que hoy es Almendrado?

-Quien me ayuda siempre es Aníbal Cepeda, un hermano de la vida. Fue uno de los músicos principales del Grupo Almendrado desde la hora cero y seguimos con una gran amistad, colabora muy amablemente con un profesionalismo como pocos y un corazón tremendo. El es mi hermano, es mi familia. Tanto que mis hijos le dicen tío. Siempre buscamos los tiempos para reírnos, charlar y hacer música.

También tengo a Javier Rodas, el baterista, otro hermano de la vida. Tenemos a Hernán Escobar en las teclas, para mí un músico consagrado en todos los sentidos. Gaby López, que está en percusión y hace coros en vivo, es otro de nuestros soldados desde hace mucho. Ellos no son los originales, los que empezamos, porque la vida pasa para todos y la mayoría tomamos decisiones y son respetables. Pero igual con estos muchachos hace años que trabajamos juntos.  Y después está Ro, mi esposa, que me acompaña a todos lados: es mi compañera, mi manager, sonidista, mi amante, esposa. Es el espejo donde puedo ver un montón de cosas que necesito para seguir en esta carrera. Y En la banda también tengo a otro músico que para mí es un lujo verlo y escucharlo, me da mucha emoción: mi hijo Rodrigo, el del medio, que tiene 20 años y es uno de los tecladistas del Grupo Almendrado. También canta pero todavía no se anima mucho. Pero ya se va a animar y la va a romper.

-Hablando de emociones. Sos un tipo muy sensible y seguramente te conmueve que haya tanta gente pendiente de Almendrado después de tantos años.

-Uff, siento un agradecimiento muy grande; tanto que después de más de 30 años desde que comenzó el Grupo Almendrado todavía me doy el placer y el espacio de emocionarme. Me admira como sigue cambiando el público, las edades, y aún siguen conociendo nuestro nombre, las canciones y las corean con nosotros. En el mismo show me emociono un montón. Digo ¡guau, qué tremendo esto! ¿Quién iba a decir que a aquel muchacho que salió del Barrio Independencia de González Catán le iba a pasar todo esto? Se siguen escuchando esas canciones que se escribieron en el estudio de grabación o en casa. Un día me puse a pensar qué le diría a esa novia que tan enamorado me tuvo.  Bueno, pasaron 32 años de ese amor a esa novia que tuve una vez y hoy es mi esposa: eso es “Un mensaje de amor”. ¡Qué locura el amor de la gente por tantas canciones!, como “Te quiero demasiado”, “De ti me enamoré”, “Dónde estarás”, la emblemática “Vaca blanca”… canciones populares que han quedado en el alma de la gente.

-En un momento armaste un show con tu esposa, con temas también de otros géneros.

-Nosotros somos una familia de arte, muy musical. Lo que hacemos con Ro es algo muy lindo, que nos llena el corazón. Cuando nos juntamos a ensayar con los muchachos a veces empezamos a hacer otras canciones y con Ro nos ponemos a cantar. También tuvimos nuestros shows, pero lo dejamos de hacer  porque estamos enfocados en Almendrado, aunque siempre nos tomamos un tiempo para divertirnos. Nuestros hijos son todos artistas, bailarines, músicos, cantantes…Tenemos tres hijos: Priscilla, que es bailarina de Nicki Nicole; mi yerno es cantante y como bailarín ahora está con María Becerra. Mi hijo Rodrigo toca el teclado con nosotros. Y Génesis, la más chica,  canta y baila muy lindo. También actúa y es una loquita linda. Y mi hijo mayor, Alex, cantó en Los Chicos de Black y en Los Chicos de La Vía. A veces los tiempos de cada uno no se cruzan, pero cuando nos encontramos todos realmente se arman cosas fantásticas.

ABAJO: Una familia de artistas.


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